Las Grandes Complicaciones representan la cumbre del arte relojero. Patek Philippe se ha impuesto en este ámbito por su virtuosismo sin igual. La manufactura domina todo el conjunto de complicaciones y destacó dos veces en el trascurso del siglo pasado  por haber creado el reloj portátil más complicado del mundo. Sus relojes perpetúan así la gran tradición en la creación de objetos de un valor eterno.